El municipio de Bornos, como tantos otros, ha vuelto a vivir un verano atípico, con la peculiaridad de haberse mantenido con una tasa de incidencia relativamente alta hasta finales de agosto, cuando ha empezado a bajar. Ello, tal y como ha relatado su alcalde, Hugo Palomares, ha dificultado la organización de actividades así como la ejecución de las mismas por el miedo que conllevaba.
No obstante, han tratado de aprovechar las no muchas oportunidades que se le presentaban, apostando por unas ‘Plazas interactivas’. Con ellas trataban de echar la vista atrás, volver al pasado, y recordar una serie de juegos tradicionales y populares en los barrios.
En cuanto al turismo, la temporada estival ha ido mejor de lo esperado en cuanto al número de visitantes recibidos. Las altas temperaturas han sido combatidas nuevamente con las alternativas que ofrece la zona del lago, con actividades de kayak y deportes acuáticos que dan el testigo ahora en el mes de septiembre al paramotor.
Bornos ya dispone de experiencia en la implantación de las atracciones infantiles en la denominada ‘no feria’ tras haberlo hecho en el Coto de Bornos en lo que ha supuesto, según Hugo Palomares, una experiencia muy satisfactoria. El edil bornense admite que “cuando el pueblo se propone algo, hace que las actividades tengan un tremendo éxito”. El dispositivo formado por seguridad privada, Policía Local y Protección Civil han garantizado las caras de felicidad de los niños. A ello se le ha sumado un concurso de balcones con el que romper la monotonía y que los vecinos los decoraran con motivos feriantes. A partir del 9 de septiembre estas atracciones estarán en Bornos con un dispositivo muy similar.