A menos de 45 horas de pregonar el Carnaval de Ubrique, las sensaciones entre los hermanos Moreno son muy dispares. Mientras Antonio se mostraba con confianza en el grupo, en lo ensayado y en lo que ha propuesto David, este no lo tiene tan claro en unos días en los que la preocupación se agrava por la previsión de lluvia. En lo que sí coinciden es en lo abrumados que se sienten dadas las muestras de cariño y felicitaciones que les están llegando durante estas semanas. “No esperaba esto. Veo más ilusión en conocidos y desconocidos que en mí. Y no es que yo no la tenga, pero esto me echa más carga al pensar que hay gente que lo espera con ganas”, apuntaba David Moreno.
Sobre el pregón en sí han adelantado que se trata de una idea que tiene desde hace mucho tiempo. “Mentiría si dijera lo contrario”, señalaba un David Moreno que reconoce que en poco tiempo tenía el planteamiento y el resultado final es el que él pretendía en un principio. Fundamentalmente, lo que buscan es “trasladarle a la gente el por qué hemos cantado lo que hemos cantado, cuál ha sido el origen de todas nuestras coplas y lo que hemos significado como agrupación de carnaval”. En ese punto jugará un papel importante su agrupación, los ‘culpables’ de que hayan llegado donde han llegado y a los que también han brindado su agradecimiento. “Se han ofrecido a complementar el pregón y han hecho un gran esfuerzo. Gente que viene de Jerez, de Córdoba… Nos ha beneficiado que el grupo no esté quemado, pero nos ha perjudicado el hecho de tener que meter cosas en tiempo récord, pero se ofrecieron todos y logramos armar una agrupación en condiciones”, han manifestado ambos hermanos.
Preparar el pregón ha sido un proceso “bonito” que les ha permitido recordar grandes anécdotas que le dejan estos 35 años dedicados a la fiesta y comprobar el legado que ostentan y que ni ellos mismos se creen cuando echan la vista atrás. De aquellos tiempos recordaban cómo David Moreno, que cursaba sus estudios universitarios en Madrid, grababa cuartetas y las grababa en un CD que enviaba por mensajería. También su padre aparecía en esos recuerdos y, evidentemente, tendrá su homenaje el próximo sábado como persona que les “inculcó la afición al carnaval. Ha escuchado todas las chirigotas de Ubrique, siempre trataba de escuchar a todas y nunca se cansó”. Y es que si les queda alguna espinita de haber rechazado el pregón en otras ocasiones es precisamente esa, la ausencia de su padre. “Es la espinita. Se murió sin escuchar su pasodoble y era una cosa que nunca le quería escribir porque me daba mal rollo y fíjate”, comentaba David Moreno.
Su padre y su casa tendrán protagonismo ya que de allí saldrán en pasacalles unos pregoneros que esperan que tras su ‘sí’, llegue el de otros carnavaleros que hasta la fecha lo han rechazado. En este sentido mencionaban a Juan Mancilla y Miguel Domínguez ‘Zioro’, como personas que podían “engancharnos con los carnavales antiguos que es de donde nació el carnaval actual”.