“Estamos en un momento precioso, de aquí a un mes estará vacunada la población más sensible, eso ya es una alegría, no tiremos por la borda todo lo hecho”. Así se ha mostrado de contundente el doctor Antonio Rodríguez Carrión con quien hemos despedido la Escuela de Salud, haciendo balance sanitario de este año 2020. Un espacio que ha cobrado aún más interés si cabe durante estos meses y que ha sido el contacto directo con el marco de la divulgación médica, en plena pandemia. Con Antonio Rodríguez Carrión, hemos querido en este día seguir haciendo educación para la salud, hablándoles de las vacunas que ya se están suministrando y de las precauciones que debemos mantener durante la celebración de Nochevieja y año nuevo.

De cara a las celebraciones del fin de año hemos recogido las recomendaciones para evitar la propagación del virus. Mantener las ventanas abiertas, usar la mascarilla en todo momento, salvo para la ingesta de bebidas y alimentos y limitar o evitar el número de participantes si no son convivientes, son algunas de las pautas establecidas desde las administraciones sanitarias para las celebraciones navideñas, y que Rodríguez Carrión resume en “lavarse las manos, mascarilla, distancia social y ventilación, ya está, no hace falta más”.

En la Escuela de Salud de hoy hemos además aludido al inicio del proceso de vacunación en España que arrancaba el pasado domingo.  Para Rodríguez Carrión sólo existen dos opciones. No vacunarse y acabar como estamos viendo o vacunarse. La Historia nos ha demostrado que las vacunas son seguras y funcionan. De hecho la OMS lo tiene claro al asegurar que “La vacunación es una forma segura y eficaz de prevenir enfermedades y salvar vidas, hoy más que nunca”.

Las vacunas son seguras  y hasta el momento tienen un elevado grado de eficacia. Además las alergias no ocurren especialmente con las vacunas, ni tampoco ahora con la de la COVID-19. La causa de las posibles reacciones está en los excipientes que lleva la vacuna.

De manera que el beneficio de la vacunación al evitar la enfermedad supera ampliamente el posible daño de las reacciones adversas detectadas. Pero el número de personas que han recibido esta vacuna a día de hoy es limitado (de unos miles de personas), por lo que puede ser que reacciones que no se han visto durante los estudios antes de la autorización aparezcan después.

Escuela de Salud 30 diciembre 2020